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martes, 11 de noviembre de 2008

Relaciones de amor-odio (2)

"...Como en cualquier otra adicción, pasas buenos momentos cuando la droga está disponible, pero, invariablemente, acaba llegando un momento en el que ya no te hace efecto.

Por eso, cuando los sentimientos dolorosos reaparecen los sientes con más intensidad que antes y, lo que es peor, ahora percibes que quien los causa es tu compañero o compañera. Esto significa que los proyectas fuera de ti y atacas al otro con toda la violencia salvaje de tu dolor.

Tu ataque puede despertar el dolor de tu pareja, que posiblemente contraatacará..."
E. Tolle - El Poder del Ahora
He repasado y repasado este párrafo, no distinguía dentro de mi la adicción. Lo identificaba como una lucha por conseguir un equilibrio entre nosotros. Lo interpretaba como un intento de crecer juntos. 

Pero algo dentro de mi estaba llamando este tipo de relación, y por eso llamó a esa persona, a alguien que podía darme una relación adictiva. Lo aprendí de pequeña con mis padres. Mi padre era adicto a mi madre. Lógicamente mi programación infantil ha buscado un hombre adicto a mi. Ahí estuvo la dificultad, porque no podía ver en mi esos rasgos, pero los pude ver al contrastar la relación entre nosotros y mis padres.

La diferencia, es que yo voy creciendo, y no quiero en mi vida situaciones de sufrimiento en las que yo entre de una forma gratuita. Si aparecen las aceptaré y las sanaré, pero no me puedo meter conscientemente en ello solo buscando algo que ahí no voy a encontrar.
"...Por eso hay tanto dolor e infelicidad en las relaciones íntimas en cuanto pasa la primera euforia. Las relaciones mismas no son la causa del dolor y de la infelicidad, sino que sacan a la superficie el dolor y la infelicidad que ya están en ti. Todas las adicciones lo hacen. Llega un momento en que la adicción deja de funcionar y sientes el dolor con más intensidad que nunca..." E. Tolle - El Poder del Ahora
Confundí su euforia inicial con amor verdadero. No entendía esos cambios de 'ahora te amo', 'ahora ya no lo se si te amo', 'ahora ya no te amo'. Ahora los comprendo. La adicción dejaba de funcionar pasado un tiempo. Cuando yo me retiraba. La adicción lo movía hacia mi, volvía la euforia, cuando entonces yo me acercaba a él, la adicción dejaba de funcionar y su dolor incrementaba de forma que ya no podía estar conmigo.
"..Si concentrasen su atención en el ahora, lo primero que encontrarían sería su propio dolor, y eso es lo que más temen. ¡Si supieran lo fácil que es acceder ahora al poder de la presencia que disuelve el pasado y su dolor, a la realidad que disuelve la ilusión! ¡Si supieran lo cerca que están de su propia realidad, lo cerca que están de Dios!.."E. Tolle - El Poder del Ahora
Claro, que esto solo lo podía hacer por mi misma, mis intentos de pedirle que fuera consciente de ello resultaron vanos, fue un intento 'tonto' de intentar que un ego comprendiera que tenía que desaparecer. ¡que inconsciente!.



1 comentario:

Concha Barbero de Dompablo dijo...

Me encanta el análisis que haces, tan válido para ti como para cualquiera de los que vivimos o hemos vivido en pareja. Somos todos tan, tan, tan... parecidos.

Me ha encantado esta frase:

“La diferencia, es que yo voy creciendo, y no quiero en mi vida situaciones de sufrimiento en las que yo entre de una forma gratuita”.

Así me siento también.

Un abrazo