Google
 

lunes, 24 de noviembre de 2008

La transformación del sufrimiento en paz

En todo este proceso, en este momento de mi vida donde todo está funcionando con total fluidez, donde mis situaciones de vida están siendo verdaderamente favorables, como mínimo bajo mi punto de vista. Me encuentro que me mantengo muy presente y muy consciente la mayor parte de mi tiempo. 

Una sensación de felicidad tranquila me invade casi continuamente, pero, sin esperarlo, sin aviso previo mi mente intenta jugarme malas pasadas. El ejercitar la presencia, el mantenerme en un estado consciente y vivir el ahora me permite identificarlo en el acto, me permite aceptarlo, observarlo y desaparece.

Pero en alguna ocasión no ha sucedido así, el cambio en mi ha sido maravilloso. En otro momento me hubiera metido totalmente a vivir desde mi mente de nuevo hasta que la situación se hubiera vuelto insoportable y hubiera tenido que salir. Ahora no, ahora cuando por algún pensamiento totalmente inconsciente aparecen emociones negativas y el dolor o el impulso de revelación a ese sufrimiento es tan grande que no puedo salid de él, puedo entrar en el dolor y en el sufrimiento de una forma totalmente consciente.
"...CUANDO NO HAY ESCAPATORIA, EXISTE UN CAMINO QUE PERMITE ATRAVESAR EL DOLOR; por tanto, no te alejes de él. Afróntalo. Siéntelo plenamente. Siéntelo, ¡no pienses en él! Exprésalo si es necesario, pero no crees un guión mental con el dolor. Pon toda tu atención en lo que sientes, no en la persona, evento o situación que parece causarlo.
No dejes que la mente use el dolor para crearse con él una identidad de víctima. Compadecerte de ti mismo y contar tu historia a los demás te mantendrá atrapado en el sufrimiento.
Como es imposible huir del sentimiento, la única posibilidad de cambio es entrar en él; si no lo haces, no cambiará nada..."  E. Tolle - El Poder del Ahora
Sí, se trata de entrar en él pero no dejarse llevar por él, no convertirse en la víctima de la situación, sólo dejarse llevar por la emoción, sentirla en su totalidad, actuar como necesites actuar (llorar, rabia...) pero mantener la presencia, mantener la observación. Cuando haces esto realmente es increíblemente fácil y dulce. Ves como lo sientes, como sientes el dolor que quizás te hace llorar compulsivamente, pero también ves que no te quedas enganchado en ese dolor, ves como sales con facilidad. Eres tu quien maneja la situación no tu dolor. Te dejas entrar pero estás observando.
"... Por tanto, concede toda la atención a lo que sientes y evita etiquetarlo mentalmente. Al entrar en el sentimiento, mantente intensamente alerta. Puede que al principio parezca un lugar oscuro y terrorífico, pero cuando sientas el impulso de huir de él, obsérvalo sin hacer nada. Continúa manteniendo la atención en el dolor, sigue sintiendo la pena, el miedo, el pavor, la soledad..., lo que estés sintiendo..." E. Tolle - El Poder del Ahora
Y funciona, el dolor desaparece, se marcha cuando tiene que desaparecer y os aseguro que es muy rápido. Y lo mejor, luego no quedan secuelas, no quedan rencores, no queda nada, sabes que se limpió lo que estaba provocando el cuerpo-dolor. Algo que quizás estaba muy muy escondido bajo una capa de análisis que lo había camuflado. Ahora aparece y puedes disolverlo.

Dale las gracias por que es maravilloso.
"...Mantente alerta, sigue estando presente, presente con todo tu ser, con cada célula de tu cuerpo. Al hacerlo, estás llevando una luz a esa oscuridad: ésa es la llama de tu conciencia.
Llegado a esta etapa, no hace falta que te preocupes de la rendición. Ya ha ocurrido. ¿Cómo? Plena atención es plena aceptación, es rendición. Dando a lo que sientes toda tu atención, usas el poder del ahora, que es el poder de tu presencia.
Este poder no permite que sobrevivan resistencias ocultas. La presencia erradica el tiempo, y sin tiempo no pueden sobrevivir el sufrimiento y la negatividad..." 
E. Tolle - El Poder del Ahora


4 comentarios:

Concha Barbero de Dompablo dijo...

Mantente alerta, presente, pero no lo retengas... Maravilloso. Tan sencillo y tanto como lo complicamos.

“El dolor es inevitable, pero el sufrimiento es opcional” (Buda).

En otra parte de El poder del ahora creo recordar que Tolle nos dice que, una vez sentido el dolor, permitamos que nos atraviese y se marche. Y eso puede aplicarse también a situaciones de miedo. Cuando oímos el ruido de una sirena de ambulancia siempre se nos pone un nudo en el estómago, porque dirigimos nuestro pensamiento a preocuparnos por si nos afecta personal o familiarmente. En tal caso, aconseja que permitamos que ese sonido entre en nosotros y nos atraviese hasta verlo salir.

Cuando sientas dolor o miedo, indica también, imagínate que tienes una brasa en la mano que te quema, suelta el dolor y el miedo como si se tratara de esa brasa ardiente.

Disculpa si no he sido fiel exactamente a lo que escribe Tolle, pero escribo basándome en la memoria. Lo leí hace tiempo.

Un beso muy fuerte

Anónimo dijo...

Me he dedicado a leer el blog los dos días pasados y no ha podido llegar en mejor momento.

Entre un momento de confusión por decisiones del pasado, culpas, entre no saber si quiero lo que estoy viviendo, o mejor dicho, estar segura de no quererlo y rechazarlo, resistirme. Haciendo imposible asi el seguir adelante, el vivir feliz.

Gracias, hare lo posible por tener en mis manos el libro lo mas pronto posible.

andres dijo...

En un momento de mi vida, que estaba muy mal, experimente de lo que habta Tolle, una noche, escuchando musica, no hice mas oidos sordos a mi olor, lo senti,e identifique, lo sentia en el corazon, luego entre el el, lo explore, pero para llegar a este paso antes debemos sacarnos el miedo. Luego de entrar profundamente en el, llore, grite y golpie. Y fue realmente milagroso, al otro dia me sentia en armonia, sentia una paz y un amor hacia la existencia que no recuerdo haber experimentado.
Lamentablemente ese estado no duro mucho, y el dolor reprimido que quedo sigue actuando, espero poder deshacerme de el pronto¡

María R. P. dijo...

Concha,

Ultimamente estoy en esa línea, en lo sencillo, en lo simple y la verdad es que es maravilloso.

Llevo unos días sin escribir nada por aquí he estado muy liada con mucho trabajo y escribir en Presencia Consciente requiere que esté totalmente centrada y con mi atención en la reflexión. El tener demasiado trabajo me hace estar demasiado en la mente, pero creo que estoy llegando a un buen equilibrio ya que aunque esté en la mente para las cosas prácticas no por ello entro en mi ego. Me siento francamente bien.

Estoy leyendo tu libro, el cual recomiendo desde aquí a todos los lectores. Entrad en el blog de Concha y desde ahí podréis encargarlo.

Andrés, lo que hiciste fue entrar en el dolor con total consciencia, a partir de ahí se crea un espacio, un vacio donde todo lo que existe eres tu mismo, simple y en total armonía contigo mismo, de ahí esa sensación. Continua trabajando y verás que eso que sucedió un día puede perpetuarse en ti para siempre.

Anónima, lo mejor que puedes hacer es observar eso que estás sintiendo, incluso esa lucha por no querer vivir tu situación de vida actual, pero sin entrar en la mente, sin empezar a pensar que tienes que rechazarlo por esto o por lo otro, solo observa tu mente e irás viendo como empiezan a cambiar cosas. Pero conscientemente no rechaces, solo observa como tu inconsciente tu mecanismo automático lo rechaza, nada más.

Gracias a todos, por vuestros comentarios, espero que antes de fin de año pueda realizar una nueva entrada en el blog, estoy poniendo las bases para no sobrecargarme de trabajo como me ha pasado ahora, no obstante, a pesar de la sobrecarga me siento genial porque observo mi estrés, observo mi agobio cuando se da y ello me permite crear un nuevo espacio donde todo empieza a cambiar a partir de mi interior y se refleja en mi exterior. Es maravilloso.